Gravel en las Bardenas Reales: ruta en un desierto declarado Reserva de la Biosfera, a una hora de los Pirineos
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El Parque Natural de las Bardenas Reales es famoso por sus llamativas formaciones fruto de la erosión y composición del suelo, dando esa imagen de paisaje lunar.
Hablar del increíble paraje de las Bardenas Reales es hablar de gravel. Se trata de un desierto declarado Reserva de la Biosfera, con aspecto lunar, a solo 70 km del Pirineo. En él encontramos los senderos excavados en roca más expuestos del mundo. Sus infinitas pistas salpicadas de bellos rincones y espectaculares miradores son la excusa perfecta para lanzarnos a practicar esta modalidad de ciclismo. La orografía no siempre es fácil, este lugar puede llegar a confundirte visualmente y hacer que nuestra mente y nuestra imaginación vayan por encima de nuestras limitaciones. Por esto es importante contar con un buen material, porque sin duda vale la pena explorarlo.
Ruta ciclista de un día por el impactante paraje de las Bardenas, el Cañón del Colorado de España.
Empezaremos nuestro recorrido en la localidad de Arguedas, escogida como centro neurálgico, ya que es una localidad que dispone de una serie de servicios dirigidos al ciclismo. Tomamos la carretera de acceso a Bardenas que a su vez nos conduce el Centro de Interpretación de Aguilares. Antes de adentrarte en este desierto fascinante te recomendamos que primero hagas esta parada. Aquí te informarán sobre cualquier duda que tengas del espacio natural. Además, podrás contemplar su diorama, la pequeña exposición arqueológica o las reproducciones de aves a tamaño real que te irán abriendo boca sobre lo que te espera en el interior del parque. Su fauna y su flora son más propias del continente africano que del norte de la Península Ibérica llegando a ser paraíso antaño de cocodrilos y tortugas. Hoy día, águilas, buitres, búhos, avutardas, zorros y reptiles campan entre matorrales, sisallares, saladares y espartales.
El Parque Natural de las Bardenas Reales es famoso por sus llamativas formaciones fruto de la erosión y composición del suelo, dando esa imagen de paisaje lunar.
Una vez superado, entramos de lleno en el Parque Natural de Bardenas Reales. Es importante respetar la normativa existente de cara a evitar problemas. Nos centraremos, concretamente, en la parte de la Bardena Blanca. La primera parte de la ruta nos conduce al sur, proponiendo una desviación al espectacular Balcón de Pilatos. Bordemos las espectaculares formaciones geológicas del Rincón del Bu para cambiar de rumbo.
Bordeando el campo de tiro, vamos a dejar a nuestra derecha la zona del Rallón y el Mirador de Juan Obispo, al cual recomendamos subir. A la altura de los Blaquizales, tomamos el camino de la derecha que conduce a Carcastillo, otro de los accesos principales a Bardenas, especialmente de la trashumancia de ganado procedente del valle de Roncal. En el km 55, giramos a la izquierda rumbo a la siguiente zona de interés; el espectacular Mirador de Estroza y unos kilómetros más adelante, el Vedado de Eguaras con las ruinas del Castillo de Peñaflor, uno de los rincones más asombrosos de Bardenas. Ponemos rumbo a Arguedas atravesando el Barranco Grande y alcanzando la archiconocida formación geológica llamada Castildetierra, lugar de obligado paso y parada en cualquier ruta por este territorio.
Abandonamos el Parque Natural, pero lo hacemos por otro camino diferente al de acceso. En este caso rodeando la sierra donde se localiza Sendaviva y ascendiendo hasta la Ermita del Yugo, lugar desde el cual podemos disfrutar de la última panorámica de Bardenas para afrontar el descenso a Arguedas al cual accederemos por el denominado Estrecho.
Después de los 107 km de recorrido, volvemos al punto de salida, Arguedas, dónde encontraremos opciones muy diferentes de alojamiento para recargar pilas. Recomendamos las casas rurales en la misma localidad. A 25 km de Arguedas llegamos a Castejón, dónde encontraremos opción de hotel. Y si nos decantamos por el camping, a 19 de Arguedas hay el Camping Bardenas, pensado y adaptado para todas las necesidades cicloturistas.
Para que puedas complementar tu expedición a las Bardenas Reales con otros atractivos de la zona hay planes divertidos y culturales muy cerca.
Una visita de la que no te vas a arrepentir es a la segunda ciudad más importante de Navarra. Tudela es una ciudad con un rico patrimonio arquitectónico que refleja a la perfección el mestizaje cultural de su historia. La Catedral de Santa María es su joya más preciada, seguida de la animada y bonita plaza de los Fueros, centro neurálgico de la ciudad. Tudela también destaca por sus creativos murales de arte contemporáneo que adornan muchas fachadas antiguas. Se gestaron en ediciones del festival internacional Avant-Garde. Gatronómicamente, es una próspera ciudad agrícola en la que se comen unas verduras que son la envidia de muchas huertas.
Otro plan para toda la familia, y a pocos kilómetros de las Bardenas Reales, es el parque de aventura Sendaviva. En él encontrarás atracciones trepidantes, animales de todos los colores y pelajes, espectáculos circenses y actividades para toda la familia. Estas dos opciones son el complemento perfecto a la belleza árida de las Bardenas Reales.
